Cyber mascotas

¿Siempres quisiste tener una mascota y te sientes frustado porque tu madre no te dejaba de pequeño, y ahora de mayor, no te dejan las dimensiones de tu piso de 30 metros? ¡Pues no te desanimes, porque aquí vienen al rescate las mascotas virtuales!

Limpias, económicas, cariñosas, ocupando poco espacio, siempre dispuestas a jugar contigo y a acompañarte mientras trabajas, juegas o navegas por internet.

Las hay para todos los gustos, desde los típicos perros y gatos hasta mascotas más exóticas como camaleones o tarántulas, seres fantásticos (hadas, trolls, dragones...) e incluso ciber-mini-yos que, a falta de que tu jefe reconozca lo bien que haces tu trabajo, irán alabándolo y poniéndote flores, toda una inyección de autoestima. Una simple búsqueda en internet te rebelará cientos de páginas dedicadas a las cyber mascotas, así que en este post incluyo solo algunos enlaces a muestras representativas de esas páginas:

Bunnyherolabs: Las mascotitas más tiernas las encontrarás aquí, las puedes poner en tu blog o web si lo deseas y parecen ideales para empezar en esto del cuidado de mascotas virtuales.

Orange: (Este vá dedicado a S.) Si eres un apasionado de los gatitos descárgate a estos cinco que jugarán contigo por toda la pantalla de tu PC.

Neopets: Aquí podrás adoptar desde un perrito, hasta a un chef o una catapulta de estiércol. Increíble...

Megasoftware: Para los amantes de la fauna exótica y peligrosa aquí podréis adoptar a una mágnifica tarántula chilena.

Tuttogratis: Si por el contrario no quieres un animalito y estás necesitado de una inyección de autoestima, aquí puedes adoptar a todo un adulador profesional.

Boxsoftware: O si lo prefieres a un mentiroso profesional (ver Poligotchi).

Pequelandia: (Este vá dedicado a R.) Entra aquí si quieres tener a Bruce Lee haciéndote llaves por el escritorio.

Programas-gratis: Y por último, si quieres ir ensayando para cuando te toque la lotería, aquí tienes a un mayordomo.

Curiosas todas ellas... no sé si decidirme a adoptar alguna. Creo que voy a preguntarle a Nana, la perrita francesa que vive con nosotros, qué le parecen...

MC.